Lleváis meses realizan dieta y haciendo
deporte, pero falta ese complemento que es casi imprescindible para ver la piel
tonificada y sin arrugas. Es por ello que muchas mujeres toman como
reafirmantes las cremas reductoras
naturales, que a pesar de no hacerte perder peso si es capaz de tonificar e
hidratar nuestro cuerpo, actuando de manera homogénea sobre la grasa,
haciéndola desaparecer de esas zonas donde se acumula.
¿Cómo
se emplean estas cremas reductoras?
Se realiza masajeando la zona en la misma dirección
y siempre de la misma forma, movimientos circulares es lo
habitual. Con ello se consigue activar la microcirculación de la grasa,
restablecer el flujo linfático y como consecuencia que nuestra piel sea más
tersa. Por lo general estas cremas reductoras suelen tener efecto calor, ideal
para favorecer la penetración de activos y vitaminas que estos anticelulíticos naturales nos
proporcionan.
Si la zona a tratar es la parte del vientre o
glúteos, como hemos indicado antes se deben de realizar pequeños círculos con
la punta de los dedos, haciendo presión hasta que la crema sea absorbida
completamente por la piel.
En las piernas y brazos, no se debe de
realizar en su longitud total de una sola vez, es mejor dividir esta por
tramos, de forma que empezaremos por rodillas o codos y poco a poco vamos hacia
el otro extremo dando pequeños masajes haciendo fuerza donde más grasa
acumulada exista.
Aunque existen multitud de anticelulíticos, incluso vaporizadores
para después de la ducha, no son tan aconsejables debido a que no poseen ese
efecto reductor que proporciona el mismo masaje. Son más bien de poner y
esperar, por lo general no son tan efectivos en el tiempo.