Para lograr esto es importante recordar que con cada intento de cambiar a las personas se anula también se identidad propia. No olvide, la aceptación es el primer paso para construir relaciones sanas fundamentadas en el respeto. Por ello es importante desarrollar la comunicación asertiva, es decir positiva, clara y enriquecedora, cuyo principal fin no sea imponer o convencer, sino dar a conocer sus emociones.