Diversos estudios constatan, que cuando la masa corporal supera un rango saludable, el individuo tiene tres veces más probabilidades de sufrir dolor o un desgarro en el cartílago de la rodilla, por eso la importancia de hacer ejercicio, tener una dieta donde el nutriólogo además de darte varias recomendaciones de salud te comentará que los jugos sirven para bajar peso y desde ahí serán parte de tu vida diaria. En tanto, las mujeres con obesidad tienen casi cuatro veces más riesgo de sufrir estos problemas, en comparación con aquellas dentro de un peso saludable. En el caso de los hombres, el peligro se multiplica por cinco.
La señal de alerta se manifiesta a través de la lumbagia, es decir, dolor en la espalda baja; posteriormente en rodillas, con movimientos que no deberían representar molestia alguna y comienza a presentarse inflamación en la articulación. El exceso de peso también aumenta la presión sobre el arco de la planta, mientras se permanece parado o se anda. Este sufrimiento es el precursor del dolor en el pie y la rodilla.