La situación pandemia por covid-19 despertó la conciencia por el cuidado y la protección de la salud de las personas. Incluso ha aumentado en gran medida la demanda de productos, equipos, dispositivos e insumos médicos tanto por parte del sector que busca mantenerse protegido de la pandemia como de igual forma aquellos que se encuentran luchando contra el temido virus.
En cualquier momento de nuestra vida hemos dependido o necesitaremos en algún momento emplear cualquier material o insumo médico, por ejemplo, en medio de la pandemia dependemos de las pruebas de diagnóstico para el covid-19. Por ello es importante conocer todo lo posible sobre la calidad de productos sanitarios y prestar la debida atención para evitar cualquier tipo de complicación o problemas debido a un producto que no cumpla con los estándares mínimos exigidos para ser reconocido como seguro para el uso en seres humanos.
Los fabricantes detallan específicamente la función o utilidad del producto, la forma de uso o aplicación, las contraindicaciones y posibles riesgos, así como la composición o estructura del mismo dependiendo si hablamos de insumo, herramientas o dispositivos médicos. Actualmente dependemos más de lo que pensamos de este tipo de dispositivos, ya sea para conseguir un diagnóstico sobre algún caso específico, prevenir algún tipo de lesión, enfermedad o afección, contrarrestar algún daño físico en función de algún tratamiento sobre alguna enfermedad o lesión.
El mundo entero se encuentra sumergido en medio de uno de los más grandes problemas de seguridad sanitaria que ha enfrentado, pero también cuentan con las herramientas necesarias para mantener controlada la situación sin que esta se convierta en algo mucho más difícil de contrarrestar. Profesionales médicos y científicos emplean estas herramientas y dispositivos para intentar alcanzar lo más rápido posible una cura definitiva mientras la población dispone de las más innovadoras tecnologías, dispositivos, herramientas e insumos médicos como medios de prevención y seguridad.
Este tipo de dispositivos han estado presentes por mucho tiempo y han enfrentado un largo proceso de desarrollo que ha permitido el nivel de calidad y seguridad que actualmente poseen, el nivel de vida y salud de los seres humanos ha mejorado y se ha logrado extender gracias a estas herramientas médicas. Determinar alguna afección o enfermedad en el pasado representaba un riesgo para la salud quizás incluso mayor que el propio padecimiento por el cual se realizaba el estudio, actualmente existen regulaciones globales y regionales que garantizan la seguridad e integridad del ser humano aplicando rigurosamente un control de calidad y estándares sujetos a estrictas normas.
Un nebulizador o una simple jeringa pueden salvar la vida de un ser humano y actualmente afecciones consideradas letales en décadas pasadas gracias a que el sector médico cuenta con estos insumos y dispositivos son simples operaciones ambulatorias que representan un riesgo mínimo.
Actualmente gracias a las regulaciones para este ámbito se define como productos sanitarios cualquier herramienta, instrumento, equipo, material, dispositivo u otro destinado específicamente a ser empleado o aplicado en procesos de diagnóstico, tratamientos o que formen parte en estos procesos. La importancia de los mismos en la seguridad sanitaria es más que evidente por lo que es necesario que se cumplan con estricta rigurosidad los estándares y parámetros exigidos para su producción y distribución.