
Tener poca masa muscular no solo afecta la apariencia, sino que también compromete la salud. Se ha vinculado con mayor riesgo de diabetes, enfermedades cardiovasculares, deterioro cognitivo y pérdida de autonomía con la edad.
Muchas veces nos enfocamos solo en perder grasa sin darnos cuenta de que conservar y construir músculo es aún más importante para la salud a largo plazo.
No es solo una cuestión estética, sino de funcionalidad y calidad de vida.
¿Tú ya entrenas fuerza?