Este aparato es una de las herramientas principales en la práctica de la anestesia pues esta tecnología que se mantiene a la vanguardia, nos permite vigilar estrechamente el comportamiento del paciente sometido bajo efectos de cualquier tipo de anestesia durante los procedimientos quirúrgicos. Los parámetros vitales importantes y que siempre deben de ser vigilados son: frecuencia cardíaca, frecuencia respiratoria, presión arterial, temperatura y trazo electrocardiográfico.
Lo anterior es indispensable para explicar al paciente lo que se hará, aclarar sus dudas, escuchar sus temores, los cuales, la mayoría de las ocasiones están justificados por mitos que persisten a pesar del paso del tiempo y los avances en esta área de la medicina, miedos que son actualmente infundados.