No existe un regla infalible para saber, a simple vista, si un joven consume drogas o no. Cuando lleva tiempo haciéndolo suele resultar más fácil de detectar, pero al principio no siempre lo es. Esta detección no debe de ningún modo convertirse en una obsesión, aunque lo contrario tampoco parece deseable.
Existen una serie de indicadores que pueden servir como pistas para estar especialmente atento. Sin embargo, el hecho que se dé en casa algunas de las circunstancias, no quiere decir necesariamente que el adolescente esté consumiendo drogas, ya que a veces algunos de estos cambios son típicos de las adolescencia.