La alimentación debe ser placentera, ella nos ofrece los nutrientes necesarios para subsistir y estar saludables, tener el cuidad de llevar lo mejor a nuestro cuerpo repercutirá en una mayor calidad de vida. Se debe tener cuidado con las bebidas, frecuentemente, encontramos en los establecimientos refrescos, jugos, aguas frescas o té helado, todos ellos embotellados y endulzados, aportando energías extras que se pueden evitar. Al menos debemos seleccionar la opción más pequeña, que tendría que ser de unos 200 o 250 mililitros, aunque la meta debería ser consumir los alimentos con agua natural.
Algo que se debe aplicar y que en ocasiones cuesta tiempo, es la capacidad para dejar de comer cuando el estómago está satisfecho, eso podría implicar pedir para llevar, compartir o dejar el resto de comida. Para eso hay que comer lento, masticar bien y estar atento a la señal de saciedad, además se puede solicitar porciones medianas o pequeñas y como poster la mejor elección es la fruta, una pieza es la opción adecuada.